Crecen las ITS: ¿Cómo actúan las farmacias comunitarias en prevención y cribado?

Ante la tendencia creciente de infecciones de transmisión sexual (ITS), especialmente entre las franjas de edad más jóvenes, las farmacias podrían tener un papel clave en la dispensación de métodos profilácticos y en la sensibilización sobre su uso. Más si se tiene en cuenta que el uso de estos entre las capas más jóvenes de la sociedad no está extendido. Todo ello a pesar de que la demanda de productos de este tipo no para de crecer: así lo hicieron hasta en un 51% en 2023 respecto a 2021, según el Observatorio de Tendencias Cofares “¿Ha llegado el amor propio a la salud personal?”.

Sumado a ello, el crecimiento de ventas de desodorantes íntimos se disparó hasta un 64% en ese mismo periodo, y el de anticonceptivos tópicos, un 31%. Por su parte, desde 2023 hasta 2022, las ventas de lubricantes han crecido un 7%. Lo que muestra que la salud sexual importa, y mucho, para los ciudadanos.

Pero más allá de poner a disposición productos específicos para la prevención de ITS, “la farmacia comunitaria puede ser un espacio complementario al sistema público en el cribado sistemático de las ITS (virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), clamidia, sífilis)", explican desde la Sociedad Española de Farmacia Clínica, Familiar y Comunitaria (SEFAC).

Apuestan en paralelo por un enfoque multifactorial: es decir, facilitar el acceso a métodos de barrera (preservativos), contribuir a una mayor educación sanitaria y participar en la detección precoz de las ITS. Al mismo tiempo, plantean otras posibilidades para poner en práctica como la difusión de trípticos informativos o la elaboración de vídeos online.

Y es que hay que lidiar aún con un alto nivel de desconocimiento entre la población, tanto joven como adulta, respecto a los factores de riesgo, signos y síntomas y las medidas de precaución que pueden adoptarse en materia de prevención de estas infecciones. Algo en lo que la formación del personal de las farmacias comunitarias es una vía para reforzar las medidas de prevención y detección de ITS en particular, y de salud pública, en general.

Llegar a los jóvenes

Los datos respecto a la concienciación sobre el uso de medidas preventivas, siguiendo el observatorio, son buenos. Si bien se aprecia una brecha generacional entre jóvenes y adultos. Así lo puso de manifiesto la ministra de Sanidad, Mónica García: “En el 2022 se ha confirmado la tendencia ascendente que observamos desde el año 2016. Este incremento afecta principalmente a adultos jóvenes entre 20-44 años, siendo más llamativo en los hombres entre 20-34 años en el caso de la sífilis y la gonorrea, y en las mujeres en el caso de la clamidia", detalló en rueda de prensa.

Por este motivo, anunció que se plantean la dispensación de los preservativos para "todos los jóvenes" de entre 14 y 22 años, “que en principio tienen que estudiar y no tienen trabajo". Dicha actuación tendría en la farmacia comunitaria su eje: la ‘receta’ se cargaría en el sistema sin necesidad de acudir al médico.