¿Adiós a la mascarilla? Razones para seguir llevándola en las farmacias

Tres años después de que iniciara la pandemia de coronavirus, acaba la obligación de usar la mascarilla en el transporte público como autobuses o trenes. Este martes 7 de febrero de 2023 se aprueba en el Consejo de Ministros el fin de su uso en el transporte público. 

Sin embargo, seguirán siendo obligatorias en el ámbito sanitario, tanto para los trabajadores como para los pacientes. Entre el listado de lugares se encuentran las oficinas de farmacia, los hospitales y los centros de salud. También los centros sociosanitarios, residencias de mayores, ópticas y clínicas dentales. Varios farmacéuticos nos dan razones por las que las mascarillas deben seguir utilizándose en estos espacios:

1. “Sólo son 5 minutos que la vas a llevar puesta y evitas contagios y propagaciones”.

Así lo explica a Mundo Farmacéutico Alejandro D., que trabaja en dos farmacias de Barcelona. De hecho, estos centros son ámbitos donde puede haber una mayor concentración de personas vulnerables en las que el riesgo de enfermedad grave es mayor, tal  y como señala el Ministerio de Sanidad.

En su opinión, lamenta “la lucha constante” con los pacientes que no quieren llevarla puesta. “Somos nosotros los que lidiamos con estas confrontaciones que, a veces, llevan a situaciones bastante violentas por parte de los pacientes”, explica.

2. “Al final, la gente que viene es la que está enferma”, recuerda Arturo Borau, de la Farmacia Borau del paseo de la Independencia de Zaragoza.

En este caso, detalla que la mayoría de la gente que entra a su farmacia lo hace sin mascarilla, a excepción de las personas mayores y clientes habituales. Según comenta, a los clientes les cuesta bastante ponérsela cuando les recuerdan que es obligatoria.

3. “El espacio de una farmacia es reducido”, puntualiza Borau.

Esto provoca que el riesgo de contagio tanto de la COVID-19 como de otros virus respiratorios pueda aumentar. Ante ello, el farmacéutico recalca que en su centro la mascarilla la llevan puesta todos los trabajadores, tanto los que están dentro como los que están de cara al cliente.

“Si hay inspección les pueden sancionar”, recordó en redes sociales el farmacéutico Guillermo Martín. El Ministerio de Trabajo desde 2020 está autorizado a poder realizar inspecciones en esta materia.

En definitiva, todos coinciden en que las farmacias son espacios sanitarios que concentran en pocos metros a personas que acuden por diferentes problemas o afecciones de salud, y el simple gesto de utilizar una mascarilla contribuye a evitar contagios y la propagación de patologías más allá del coronavirus.