Atrás ¿Codo de tenista o codo de golfista?

¿Codo de tenista o codo de golfista?

Lo que coloquialmente se conoce como codo de tenista es una epicondilitis, mientras que el codo de golfista corresponde a una epitrocleítis. A pesar de asociarse a tenistas y golfistas, la realidad es que muchos de los que sufren estas dolencias no son deportistas, sino personas que en sus actividades cotidianas o laborales realizan esfuerzos repetitivos de los músculos del codo.

Codo de tenista

Escrito porRedacción MF

Publicado: 05 septiembre 2022

El codo es una articulación compleja, ya que está formada por tres huesos (húmero, radio y cúbito), múltiples ligamentos, músculos y tendones, cuya función es mantener la estabilidad y permitir una movilización articular correcta. La epicondilitis o codo de tenista y la epitrocleítis o codo de golfista son dos de las patologías más frecuentes que puede sufrir esta articulación y que presentan algunos rasgos en común. 

En primer lugar, ambas son tendinitis (es decir, la inflamación de un tendón) y están causadas por movimientos repetitivos de la musculatura del brazo y del codo. Además, las dos son bastante comunes, aunque la epicondilitis tiene una incidencia mayor que la epitrocleítis, ya que afecta a un 72,6 % de la población frente a un 17,6 % del codo de golfista.

Si bien, debido a la denominación popular, estas patologías se asocian a tenistas y a golfistas, la realidad es que muchos de los que las sufren no son deportistas. Estas lesiones se producen con frecuencia al realizar actividades de la vida cotidiana que suponen esfuerzos repetitivos de los músculos del codo. 

Por tanto, son comunes en personas que trabajan con ordenadores, que realizan tareas del hogar o que desempeñan su labor profesional en la construcción, la jardinería o la carpintería.

Diferencias entre codo de tenista y de golfista

El codo de tenista afecta a los músculos del antebrazo que se unen al hueso lateral del codo. Se caracteriza por el dolor en la cara externa del codo pudiendo llegar al antebrazo. Impide realizar movimientos como abrir botes o puertas, apretar las manos o levantar la muñeca. 

Por su parte, el codo de golfista se debe a la inflamación de los tendones de los músculos que flexionan o doblan la palma de la mano hacia la muñeca y el antebrazo hacia el brazo, ocasionando dolor en la cara interna del codo y antebrazo. Impide realizar movimientos como agarrar objetos.