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Laura Carrasco Marín: “La farmacia puede ser la perfecta aliada para gestionar la ingente cantidad de fármacos de personas con párkinson que estén solas”

La presidenta de la Asociación Parkinson Madrid destaca el papel del sector en la ayuda a personas con esta enfermedad, de la que hoy se conmemora su día mundial

Laura Carrasco Marín: “La farmacia puede ser la perfecta aliada para gestionar la ingente cantidad de fármacos de personas con párkinson que estén solas”

Escrito porRedacción MF

Publicado: 11 abril 2024

Este jueves 11 de abril se conmemora el Día Mundial del Párkinson, enfermedad de origen neurológico que afecta a alrededor de 160.000 personas en nuestro país, según la Sociedad Española de Neurología (SEN). Por este motivo, hablamos con Laura Carrasco Marín, presidenta de la Asociación Parkinson Madrid, que destaca el papel clave de la farmacia en el seguimiento farmacológico de su tratamiento.

P: ¿Cuáles son los principales desafíos a los que se enfrentan en la actualidad las personas con párkinson en España?

El gran desafío, ahora y siempre, es el poder sobrellevar la imparable pérdida de autonomía e independencia en la que sume esta enfermedad. Porque es una enfermedad que hoy por hoy no tiene cura y que es degenerativa, con lo que avanza sin remedio.

Lo más conocido es el temblor y la imagen que todos tenemos es la de una persona mayor con las manos temblando. Pero la enfermedad de Parkinson es mucho más compleja que eso.

Para empezar, no solo es enfermedad de personas mayores, el 15% de las personas con párkinson son diagnosticadas antes de los 50 años. Además, menos de la mitad de las personas con párkinson tienen temblor. Rigidez, lentitud, pérdida de equilibrio… Son muchos los síntomas asociados al movimiento y que van paralizando a la persona hasta que necesita la ayuda de otras para realizar cualquier actividad.

Tampoco se conocen los efectos psicológicos que tiene la enfermedad: depresión, ansiedad y cambios de humor. En algunos casos produce trastornos psiquiátricos como alucinaciones y delirios, siendo estos últimos muy disruptivos en la familia. Existe un deterioro cognitivo típico de la enfermedad y que difiere del más conocido (Alzhéimer). Tampoco se conocen los efectos sobre el habla, que dificultan mucho la comunicación con los demás.

Al final, entre las dificultades de movimiento y de comunicación, las personas con párkinson tienden al aislamiento y la soledad.

P: ¿Qué papel diría que tienen las farmacias comunitarias en el abordaje y seguimiento de los pacientes y de la adherencia a sus tratamientos?

El tratamiento farmacológico en la enfermedad de Parkinson es fundamental. La falta de medicación produce un desajuste y paralización que afectan mucho a la autonomía y a la calidad de vida. De tal forma que seguir la pauta marcada por el facultativo es muy importante. El seguimiento en la pauta y la vigilancia del tratamiento son claves. Por esta razón, el servicio que se ofrece desde las farmacias para la preparación de la medicación (SPD) puede ser de gran utilidad.

En este sentido, en caso de personas que vivan solas o que sus cuidadores principales también sean mayores y con dificultades y los hijos, en caso de haberlos, no estén cerca, la farmacia puede ser la perfecta aliada para hacer una monitorización sobre la adherencia y ayudar a las personas a gestionar la ingente cantidad de fármacos que tienen que administrarse.

Cedida (Asociación Párkinson Madrid)
Cedida (Asociación Párkinson Madrid)

P: ¿Cómo cree que desde las oficinas de farmacia se puede contribuir a sensibilizar a la sociedad sobre esta enfermedad?

Los profesionales que trabajan en una farmacia saben perfectamente cómo es el día a día de una persona con párkinson porque en esa relación de cercanía, los pacientes o las familias cuentan sobre las dificultades a las que se enfrentan.

Por esta razón, quienes trabajan en las oficinas de farmacia pueden ser altavoces, simplemente con otros pacientes o en su propio entorno personal. Además, el espacio físico de la oficina de farmacia también es un buen lugar para difundir información.

P: ¿De qué manera colaboran desde Parkinson Madrid con el sector farmacéutico?

Desde la Asociación Parkinson Madrid estamos muy agradecidos por la colaboración que siempre brindan las oficinas y los colegios oficiales. Hemos tenido campañas muy interesantes con infografías y folletos que se entregaban en las oficinas de farmacia con la colaboración indispensable de Cofares.

También hemos celebrado eventos formativos sobre la enfermedad a las personas que trabajan en las oficinas con el apoyo de colegios profesionales. Las convocatorias han resultado muy exitosas y estamos muy agradecidos por la acogida y el interés que siempre han mostrado las personas que trabajan en las oficinas de farmacia.

Desde la situación pandémica que lo ha invadido todo, no hemos vuelto a realizar ninguna acción, pero estamos seguros de que contaremos con el apoyo de todos para las próximas campañas que realizaremos.

P: ¿Qué medidas se deberían potenciar para implicar a cada vez más profesionales?

El conocimiento sobre la enfermedad resulta fundamental para entender cuál es la realidad de la persona y familia de puertas para adentro.

Desde la oficina de farmacia se puede reconocer la soledad y situaciones de riesgo o vulnerabilidad, y en estos casos, se puede ofrecer la preparación de la medicación y  tener la información sobre otros recursos a dónde poder derivar que pueden ser de gran utilidad: las asociaciones de párkinson, servicios sociales locales, ayudas a la dependencia…