Atrás La farmacia comunitaria como eje para reducir riesgos y mejorar la seguridad del paciente en cada dispensación

La farmacia comunitaria como eje para reducir riesgos y mejorar la seguridad del paciente en cada dispensación

Los profesionales de la farmacia ofrecen una atención farmacéutica rigurosa basada en protocolos, normativa y verificación clínica para garantizar una medicación segura y eficaz.

La farmacia comunitaria como eje para reducir riesgos y mejorar la seguridad del paciente en cada dispensación

Escrito porRedacción MF

Publicado: 17 septiembre 2025

La estrategia de seguridad del paciente es la disciplina de atención de la salud cuyo objetivo es prevenir y reducir los riesgos, errores y daños que sufren durante la prestación de la asistencia sanitaria. En el caso de la farmacia comunitaria se centra en garantizar que cada dispensación sea un acto clínico seguro y personalizado.

Esto implica aplicar procesos normalizados de trabajo, evaluar la idoneidad de la medicación y reforzar la educación sanitaria al paciente. Los objetivos son minimizar peligros, mejorar la adherencia y prevenir resultados adversos derivados del uso inadecuado de fármacos.

Prevenir errores y reducir costes

Los errores con la medicación se pueden originar en:

  • El diagnóstico
  • La prescripción
  • El propio uso de los medicamentos

Su impacto en términos de morbilidad, hospitalizaciones y mortalidad es significativo y representan un elevado coste para el Sistema Nacional de Salud (SNS), tanto en disminución de la calidad de vida de los pacientes como en recursos asistenciales.

Cada año miles de pacientes sufren daños evitables por errores en su tratamiento

La labor de detección precoz en la farmacia comunitaria permite evitar duplicidades, interacciones y tratamientos innecesarios; por tanto, contribuye a lograr un sistema más eficiente.

Normativas y guías

En España, la Ley 29/2006 de garantías y uso racional de los medicamentos y productos sanitarios, cuya reforma se ha aprobado recientemente, establece la base legal de la atención farmacéutica. Además, la Estrategia de Seguridad del Paciente del Ministerio de Sanidad refuerza la implantación de prácticas seguras en todos los niveles asistenciales.

En el ámbito internacional, el Consejo de Europa recoge en su informe sobre la seguridad del paciente la necesidad de integrar al farmacéutico en el circuito asistencial para reducir los riesgos y aumentar la calidad de los tratamientos.

Problemas de farmacoterapia

Durante la práctica diaria, la farmacia comunitaria desempeña un papel crítico a la hora de detectar problemas relacionados con la medicación, desde contraindicaciones hasta interacciones farmacológicas relevantes o errores de prescripción.

La seguridad del paciente está respaldada por un marco regulatorio sólido

La revisión estructurada de la farmacoterapia permite intervenir antes de que se produzca un daño, gracias a que facilita la comunicación con otros profesionales sanitarios para ofrecer al paciente una atención más segura y coordinada.

Listados de verificación

Asimismo, la utilización de listados de verificación o checklists constituye una herramienta sencilla y eficaz para estandarizar procesos. En el ámbito de la farmacia comunitaria se aplican para:

  • Confirmar la adecuación de la dispensación
  • Comprobar alergias conocidas
  • Asegurar la adherencia
  • Registrar intervenciones clínicas

Estas listas, integradas en protocolos nacionales y en guías profesionales, se han consolidado como un recurso imprescindible para garantizar la seguridad en la práctica farmacéutica.