Cambio de pelaje: presta atención a las necesidades de tu mascota

La muda es un proceso natural y cíclico, tanto para perros como para gatos. Sin embargo, en los periodos de cambios de temperatura, este cambio de pelaje es más notorio ya que les sirve para adaptarse al cambio estacional. De tal manera, cuando pasamos de otoño a invierno, es normal que los animales cambien el pelo a uno más denso que les proteja del frío; mientras que en el cambio de primavera a verano, mudan este pelaje a uno más fresco. 

En ambos casos, el cepillado del pelo es imperativo. Los gatos suelen perder alrededor del 50% de su pelo en esta época y, aunque la muda de los perros no sea tan llamativa, también es conveniente el cepillado diario.

Señales que indican la muda de pelo

Existen señales evidentes de que nuestras mascotas están mudando el pelo, como es la simple aparición de éste por todos los lugares de la casa. Es común, incluso, encontrar mechones completos. En principio, esto no es un signo de alerta, sin embargo, es necesario que nos fijemos en la piel de nuestras mascotas y acudir al veterinario en caso de encontrar espacios de piel sin pelo o calvas.

Una señal característica de los perros es el rascado. Si vemos que nuestro perro se está rascando más de lo habitual, es probable que el pelo muerto a mudar todavía esté adherido a su piel, lo que provoca este picor. 

En el caso de los gatos, es importante tanto el cepillado como el mantener el hogar limpio. Esto se debe a que los felinos pueden ingerir el pelo y provocar la formación de bolas de pelo. 

Nutracéuticos, los grandes aliados

La alimentación es una pieza clave en la muda de pelo, pero es posible que durante estos meses sea necesario agregar algo extra a la dieta de las mascotas. Desde la farmacia, podemos aconsejar a nuestros pacientes con animales que agreguen suplementos a su dieta. Entre ellos, los más recomendados son los siguientes:

• Malta. Especialmente en el caso de los gatos. Este suplemento actúa atrapando el pelo suelto en el tracto digestivo gracias a su consistencia pegajosa, lo que hará que el gato los expulse de forma natural.
• Ácidos grasos, como el Omega 3 o el Omega 6. Estos suplementos se usan especialmente en mascotas con dermatitis atópica o alergias, ya que ayudan a mejorar el aspecto de la piel y aportan un brillo especial al pelo.