Yoga: más allá del deporte

Los beneficios corporales de la práctica del yoga son innumerables, desde la tonificación pasando por el fortalecimiento de los músculos o la mejora de la flexibilidad, todo ello sin olvidarnos de la ayuda que aporta a la hora de destensar a nivel muscular determinadas zonas.

Además, a nivel físico contribuye a la quema de calorías al aumentar la masa muscular, incrementando el gasto calórico sesión a sesión y ayudando a reducir la presión arterial del organismo.

En cuanto al impacto mental, la práctica de yoga baja los niveles de cortisol por lo que nos ayuda a disminuir el estrés y la ansiedad, adaptándonos a ritmos más relajados y tranquilos. De igual modo, la respiración fluida y los ejercicios con meditación también contribuirán a dormir mejor.

Antes de empezar a practicar yoga deberemos tener en cuenta que existen numerosos tipos: Bikram, Integral, Ashtanga… Por lo que tendremos que adaptar nuestros objetivos con nuestra forma física y necesidades.