La congelación de tejidos podría hacer posible la creación de ovarios artificiales
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Innovación en salud
La congelación de tejidos podría hacer posible la creación de ovarios artificiales
Los nuevos avances en la comprensión del atlas ovárico permiten conocer qué genes están activos para que sean modificados con el fin de crear un folículo funcional transplantable susceptible de embarazo.

Escrito porRedacción MF
Publicado: 09 mayo 2024
Un estudio de la Universidad de Michigan (EE.UU) ha hecho un descubrimiento que podría ayudar a desarrollar tratamientos para restablecer la producción de hormonas ováricas y la capacidad de tener hijos biológicos. Este hallazgo podría ser el primer paso para la creación de ovarios artificiales, claves en personas con problemas de fertilidad o mujeres que han sido sometidas a tratamientos como la quimioterapia o radioterapia.
Estos ovarios artificiales estarían hechos con tejidos almacenados y congelados antes de la realización de tratamientos agresivos. Hasta ahora, los médicos podían implantar una parte del tejido de los ovarios previamente congelado para reanudar la producción de óvulos y hormonas de manera temporal. No obstante, son muy pocos los folículos generadores de hormonas y transportadores de óvulos que superan la reimplantación, por lo que la solución es a muy corto plazo y no suficiente.
Por ello, los investigadores de este estudio, publicado en la revista Science Advances, han intentado ir más allá y comprender mejor el atlas del ovario. Para ello, han utilizado la secuenciación de 5 ovarios donados por mujeres premenopáusicas, sin antecedentes de cáncer, enfermedades que dañen la función ovárica o terapia androgénica previa.
Secuenciación de ovarios gracias a la tecnología transcriptómica espacial
En sus resultados han revelado cuáles son los factores que hacen que un folículo pueda madurar y gracias a los avances en el ámbito tecnológico, como es la tecnología transcriptómica espacial, se ha podido monitorizar la actividad genética y su localización en muestras de tejido ovárico. “Esta fue la primera vez que pudimos apuntar a los folículos y ovocitos ováricos y realizar un análisis de transcripción, que nos permite ver qué genes están activos”, ha explicado Ariella Shikanov, una de las autoras del estudio.
Sabiendo qué genes están activos en los ovocitos se podría probar a actuar sobre ellos para desarrollar un folículo funcional, lo que abre las puertas a la creación de ovarios artificiales que se podrían trasplantar. Con la capacidad de guiar el desarrollo del folículo y ajustar el entorno ovárico, los investigadores creen que el tejido ovárico diseñado podría tener una duración mucho más larga que el tejido implantado no modificado.
Esto a la práctica se traduciría en que las pacientes contarían con una ventana de fertilidad más amplia, así como un período más prolongado de producción de hormonas que ayudan en la regulación del ciclo menstrual, además de mejorar la salud muscular, esquelética, sexual y cardiovascular.
“La mayoría de los folículos ováricos, ya presentes en el nacimiento, nunca entran en el grupo de crecimiento y eventualmente se autodestruyen. Estos nuevos datos nos permiten comenzar a comprender qué hace que un óvulo sea bueno: qué determina qué folículo crecerá, ovulará, será fertilizado y se convertirá en un bebé”, explica Shikanov