El sistema sanitario español contribuye un 4,5% a la huella de carbono nacional

El mundo se encuentra desde hace años luchando contra el cambio climático. Para abordar esta urgente crisis se ha organizado la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2023 (COP28). Entre los múltiples frentes que se han debatido en la reunión, la descarbonización, en especial en el ámbito sanitario, ha tenido un papel protagonista.

El uso abusivo de combustibles fósiles, como bien subrayó Simon Stiell de la CMNUCC, no solo desencadena una crisis ambiental, sino que también ejerce una gran presión sobre los presupuestos familiares y globales. El impacto de estos combustibles en el medio ambiente es un acelerante del cambio climático, desencadenando secuelas devastadoras como sequías, hambrunas y un aumento en las áreas de acción de enfermedades, entre otros problemas.

La Sociedad Madrileña de Neumología y Cirugía Torácica (Neumomadrid) ha publicado un artículo en la Revista de Patología Respiratoria, titulado 'Posicionamiento y recomendaciones sobre cambio climático', en el que la entidad declara la emergencia climática y aporta el alarmante dato de que el sistema sanitario español contribuye con un 4,5% a la huella de carbono nacional, cifra que sitúa a este sector como uno de los protagonistas involuntarios de la contaminación. A nivel global, su huella podría compararse con la de un país que figura entre los cinco más contaminantes del mundo.

El compromiso de Europa y las medidas necesarias

Europa ha fijado el objetivo de reducir las emisiones en un 60% para el año 2030. Este compromiso ha movilizado a empresas del sector salud, la industria farmacéutica y hospitales para actuar de manera proactiva para conseguirlo. En España, país que representa a Europa en esta COP28, se han lanzado diversas iniciativas para avanzar en la descarbonización.

La concienciación de los profesionales sanitarios sobre la importancia de su participación en la acción climática, la obtención de certificaciones de calidad como el ISO 14001 por parte de los centros sanitarios, la reducción del desperdicio alimentario, la actualización de instalaciones eléctricas y de agua, la minimización del uso de papel y plástico, así como la promoción de fármacos más ecológicos, como inhaladores menos contaminantes, son algunas de las medidas implementadas.

Desafíos pendientes y oportunidades por explorar

A pesar de estos esfuerzos, tanto en España como en otros lugares del mundo, existen medidas importantes que aún no se han implementado. El crecimiento de la telemedicina, la instauración de unidades de sostenibilidad y cambio climático en los hospitales, así como la investigación y seguimiento en este proceso, son aspectos donde aún se puede avanzar significativamente.

Es crucial considerar los récords de temperaturas a nivel mundial y los fenómenos climáticos extremos que están impactando a la población global. La descarbonización del sector sanitario no solo es un imperativo ambiental, sino también una vía para fortalecer la resiliencia de los sistemas de salud ante los desafíos actuales y futuros.