Atrás La caléndula y el árbol de té: dos aliados naturales para el sistema locomotor

La caléndula y el árbol de té: dos aliados naturales para el sistema locomotor

En los últimos años las plantas medicinales han adquirido gran importancia en terapias complementarias en varias regiones del mundo.

La caléndula y el árbol de té: dos aliados naturales para el sistema locomotor

Escrito porRedacción MF

Publicado: 25 noviembre 2022

Las plantas con acción medicinal tienen la característica común de poseer un elevado contenido en sustancias o principios activos con propiedades químicas, bioquímicas y organolépticas muy específicas, que permiten su utilización con fines terapéuticos, aromáticos y dietéticos.

La amplia variedad de plantas medicinales hace que sean un recurso muy útil para diferentes tipos de patologías, como artritis y demás procesos inflamatorios, dolores musculares, fatiga, etc.

Algunos de los numerosos ejemplos son la caléndula (Calendulaofficinalis), el hipérico (Hypericumperforatum), el árbol de té (Melaleucaalternafolia) o el árnica (Arnica montana), pudiendo usarse solas o en combinación para una cobertura más amplia. 

Los efectos conseguidos con las plantas medicinales son, generalmente, gracias a los metabolitos secundarios que producen. Debido a la diversidad de compuestos activos que presentan, no solo serán útiles para una patología, si no que podremos utilizarlas en múltiples casos. 

Caléndula 

Así, la caléndula presenta una gran variedad de beneficios para la salud, entre los que destaca su actividad antimicrobiana, antioxidante, cicatrizante y antiinflamatoria. Esta última es debida a la presencia de triterpenos como el faradiol en las flores de la planta.

Hipérico

El hipérico, por otra parte, tiene actividad regeneradora y antiinflamatoria, entre otras. Dentro de los principales componentes del extracto, destaca naftodiantronas y flavonoides, con ejemplos como hypericina, amentoflavona, hiperósido e isoquercitrina. Este conjunto de compuestos le otorga a la planta los múltiples beneficios mencionados. 

Árbol de té

El aceite esencial de árbol de té tiene una composición muy diversa que proporciona una amplia variedad de beneficios, como su característica actividad antimicrobiana, calmante y antiinflamatoria. Esto se consigue gracias a compuestos fenólicos como el terpinen-4-ol y monoterpenos cíclicos como el 1,8-cineol. 

Árnica 

El árnica, a su vez, tiene actividad astringente, estimulante del sistema inmunológico, antimicrobiana y antiinflamatoria, entre otras. Su aceite esencial es muy rico en compuestos activos, entre los que se encuentran monoterpenos como el ɑ-pineno.

Como vemos, estos son solo algunos de los múltiples ejemplos que presenta la fitoterapia y sus distintas aplicaciones. Debido a su importancia y beneficios, es un recurso esencial en la terapéutica, además de un campo de investigación en auge. Gracias a los avances tecnológicos, podemos incluir extractos de estas plantas en muchas formulaciones, obteniendo así una amplia gama de productos valiosos.