Atrás Alzheimer, la enfermedad silenciosa que ya afecta a uno de cada diez mayores españoles

Alzheimer, la enfermedad silenciosa que ya afecta a uno de cada diez mayores españoles

Cada 21 de septiembre se conmemora el Día Mundial de esta patología neurodegenerativa, el tipo de demencia más común. Los fármacos centrados en la proteína amiloide, la gran esperanza.

Alzheimer, la enfermedad silenciosa que ya afecta a uno de cada diez mayores españoles

Escrito porRedacción MF

Publicado: 20 septiembre 2024

Este sábado 21 de septiembre se conmemora el Día Mundial de la enfermedad de Alzheimer, que afecta a unas 800.000 personas en España. La gran mayoría, mayores, grupo en el que uno de cada diez está diagnosticado de esta patología neurodegenerativa, según los datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), y a uno de cada tres mayores de 85 años. Esta es la forma más común de demencia, y engloba entre el 50% y el 70% de los casos totales que hay en nuestro país.

Teniendo en cuenta que hasta el 8% del total de las muertes en España fueron producto de algún tipo de demencia, y que el alzhéimer es la más común de entre ellas, el abordaje y la búsqueda de nuevos tratamientos para atenuar su impacto es clave. En este sentido, la farmacia comunitaria también tiene un papel fundamental en la detección precoz de los primeros síntomas de esta enfermedad. Actualmente, los profesionales indican que el tiempo que se tarda en detectar la patología puede superar los dos años. Sin olvidar, recuerda la SEN, que “existe aún un alto infradiagnóstico de esta enfermedad”. En especial en los casos leves: estiman que más de la mitad de los casos en esta fase todavía no se han diagnosticado.

Tratamientos esperanzadores

Respecto a los tratamientos para hacer frente al alzhéimer, y tras dos décadas sin novedades, en la actualidad se están investigando más de cien nuevos compuestos. Como resultado, se están conociendo hallazgos interesantes con el foco puesto sobre la proteína amiloide, que sería un desencadenante clave en la aparición y el desarrollo de la enfermedad.

Por otra parte, una investigación realizada en el Reino Unido y publicada en Science ha permitido desarrollar una terapia capaz de eliminar los agregados de la proteína tau, asociados con la enfermedad de Alzheimer. Si bien de momento se ha probado en modelos animales, los resultados son prometedores y podría tener implicaciones para otros trastornos cerebrales relacionados con la acumulación de proteínas.

En la actualidad se están investigando más de cien nuevos compuestos

Fármacos como lecanemab, cuyo uso ya está activo y autorizado por la FDA, siguen a la espera de tener el visto bueno de la EMA para su uso en pacientes europeos. Según la Confederación Española de Alzheimer y otras Demencias (Ceafa), esta terapia ha llegado a demostrar una eficacia de un 27% en un periodo de 18 meses de ralentización de la evolución de la enfermedad. Ahora mismo, la eficacia es nula debido a la ausencia de tratamientos eficaces.

Fármacos contra el cáncer y la diabetes, potenciales candidatos

Entre los potenciales usos para tratar las fases iniciales de esta patología, recientemente un estudio publicado en Science sugería que un tipo de fármaco desarrollado para tratar el cáncer podría actuar también frente a enfermedades neurodegenerativas. En concreto, se ha hallado un potencial uso de los inhibidores de la enzima indol-2,3-dioxigenasa 1 (IDO1), que al actuar podrían rescatar la memoria y la función cerebral.

En esa línea, otro hallazgo publicado en Neurology concluye que una clase de medicamentos para la diabetes puede estar asociada con un menor riesgo de demencia y enfermedad de Alzheimer. El equipo de investigadores coreanos descubrió que el uso de inhibidores de SGLT2 se asociaba con una reducción del 20% del riesgo padecer esta patología, así como también otra disminución del 20% en la enfermedad de Parkinson.

Fármacos utilizados inicialmente contra el cáncer o la diabetes podrían tener potenciales usos también frente al Alzheimer

Más allá de las innovaciones farmacológicas, también se está profundizando sobre la importancia de mantener una buena salud mental durante toda la vida como dique frente al alzhéimer. Por esta razón, la SEN señala que casi uno de cada dos casos de esta enfermedad es atribuible a factores modificables al estilo de vida y los factores de riesgo vascular.

De ahí que los profesionales sanitarios, entre ellos los farmacéuticos comunitarios como agentes más cercanos a los pacientes, tengan un rol esencial en la educación sanitaria para fomentar unos buenos hábitos de vida. De entre las medidas que ayudarían a este fin están dejar el consumo de alcohol y tabaco; realizar ejercicio físico; mantenerse cognitiva y socialmente activo, corregir la pérdida de audición o visión; tener un peso saludable, controlar la diabetes, la hipercolesterolemia y la hipertensión arterial, entre otras.