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La importancia de los ritmos circadianos en la salud: el reloj biológico que regula nuestro bienestar

Mantener un adecuado ritmo circadiano es esencial para el funcionamiento óptimo del cuerpo, influenciando desde el sueño hasta la regulación hormonal y el metabolismo.

La importancia de los ritmos circadianos en la salud: el reloj biológico que regula nuestro bienestar

Escrito porRedacción MF

Publicado: 28 octubre 2024

Los ritmos circadianos son ciclos biológicos de aproximadamente 24 horas que influyen en los procesos fisiológicos del cuerpo, como el sueño, la temperatura corporal y la liberación de hormonas. Este ‘reloj biológico’ es controlado por el núcleo supraquiasmático (NSQ) en el hipotálamo, que responde a señales de luz y oscuridad, ayudando a sincronizar las funciones internas con el ambiente externo.

Según el Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano (NICHD), estos ritmos afectan a cómo dormimos, nuestra capacidad para concentrarnos y hasta la forma en que digerimos los alimentos. Así, es crucial mantener un equilibrio en los ritmos circadianos, ya que su alteración puede tener graves repercusiones en la salud, contribuyendo al desarrollo de enfermedades metabólicas, trastornos del sueño y problemas de salud mental.

Los ritmos circadianos no solo determinan los ciclos de sueño y vigilia, sino que regulan la mayoría de las funciones fisiológicas del cuerpo. Mantener una rutina constante de sueño, exposición a la luz natural y evitar dispositivos electrónicos antes de dormir puede ayudar a mantener este equilibrio.

Diversas investigaciones han mostrado que la alteración de los ritmos circadianos, como en el caso de los trabajadores por turnos o aquellos que viajan frecuentemente a través de husos horarios, se asocia con mayores riesgos de desarrollar enfermedades como la obesidad, diabetes tipo 2 y síndrome metabólico.

Cómo cuidar nuestros ritmos circadianos

El NICHD resalta que la luz natural es uno de los factores más importantes para sincronizar el reloj biológico, pues el núcleo supraquiasmático utiliza la luz del día para regular los ritmos circadianos. De esta manera, ajusta las funciones del cuerpo en consecuencia.

Por otra parte, algunos expertos sugieren que establecer horarios constantes para dormir y despertarse ayuda a mantener un equilibrio circadiano saludable. Además, se recomienda evitar la luz azul por la noche, puesto que el uso de dispositivos electrónicos en horas nocturnas puede interrumpir la producción de melatonina.

El impacto del cambio de hora en los ritmos circadianos

El cambio de hora, tanto en primavera como en otoño, puede alterar significativamente los ritmos circadianos. Este ajuste en el reloj externo afecta la sincronización del ‘reloj interno’ del cuerpo, lo que genera desequilibrios temporales en el ciclo sueño-vigilia. Según el Centro de Investigación y Tratamiento del Alzheimer (CITA), esta alteración temporal, aunque aparentemente leve, puede influir en el estado de ánimo.

Además, la reducción de horas de luz en otoño e invierno intensifica estos efectos, ya que la menor exposición a la luz natural retrasa la producción de melatonina y desincroniza el reloj biológico, lo que puede llevar a un aumento en la sensación de cansancio y afectar el estado emocional. Por eso, es recomendable mantener hábitos saludables de exposición a la luz y rutinas regulares para minimizar estos efectos sobre los ritmos circadianos.