Atrás Atención al paciente polimedicado: pérdidas de equilibrio por el efecto de fármacos

Atención al paciente polimedicado: pérdidas de equilibrio por el efecto de fármacos

La ingesta de determinados fármacos puede aumentar el riesgo de caídas en los mayores, al alterar de alguna manera la consciencia y la coordinación.

Persona mayor que ha sufrido una caída

Escrito porRedacción MF

Publicado: 13 junio 2024

Uno de los principales riesgos de las personas mayores son las caídas, que a esas edades suelen derivar en fracturas y, en muchas ocasiones, sus efectos acaban limitando la calidad de vida durante el resto de la vida. Según datos facilitados por el Ministerio de Sanidad el 30% de los mayores de 65 años y el 50% de los mayores de 80 años sufren al menos una caída al año, especialmente las mujeres.

Los principales motivos por los que se producen las caídas, según el propio Ministerio, es la falta de ejercicio físico, que reduce la agilidad en los movimientos, un entorno no seguro y la ingesta de ciertos medicamentos que pueden alterar la consciencia y la coordinación, propiciando estos accidentes. 

Algunos consejos que nos recomiendan son mantenerse activo para evitar el deterioro de la capacidad funcional y mejorar la fuerza muscular, coordinación y equilibrio, mantener la casa segura, con una buena iluminación, pocas alfombras y bien sujetas al suelo, zonas despejadas de objetos con los que tropezar, herramientas necesarias siempre a mano y plato de ducha en vez de bañera.

Ciertos medicamentos pueden propiciar las caídas

También es necesario revisar la medicación que se toma, pues ciertos fármacos pueden hacer que la persona tenga momentos en los que se sienta más débil, mareado o que pierda la coordinación durante un periodo corto de tiempo, decisivo para propiciar una caída.

Algunos de los tipos de medicamentos que influyen más en las caídas son:

  • Psicofármacos: como sedantes o tranquilizantes, que pueden causar somnolencia, reducción de la alerta o mareos.
  • Pastillas para dormir, controlar la ansiedad o los trastornos del comportamiento: como las benzodiacepinas, los somníferos, los tranquilizantes o antipsicóticos, estos medicamentos alteran la consciencia y pueden afectar al equilibrio.
  • Antidiabéticos y antihipertensivos: su mayor riesgo es que pueden reducir demasiado la tensión arterial, provocando una hipotensión ortostática, es decir, que con los cambios de posición, como al ponerse de pie, podrían ocasionar mareos o síncopes.

Los pacientes polimedicados tienen un mayor riesgo de caídas, pues multiplican el consumo de fármacos y con ellos sus efectos. Por ello, desde la farmacia se puede hacer un seguimiento a estos pacientes para encontrar fallos en la medicación, por ejemplo, que se sigan tomando cuando ya no son necesarios, y dando consejos a los más mayores para evitar posibles caídas.