Atrás Liraglutida y semaglutida reducen un 68% el consumo de alcohol

Liraglutida y semaglutida reducen un 68% el consumo de alcohol

Un estudio clínico en pacientes con obesidad apunta a un posible beneficio adicional de los análogos de GLP-1.

Liraglutida y semaglutida reducen un 68% el consumo de alcohol

Escrito porRedacción MF

Publicado: 23 mayo 2025

Un estudio publicado recientemente en la revista Diabetes, Obesity and Metabolism sugiere que los análogos del péptido similar al glucagón tipo 1 (GLP-1), específicamente liraglutida y semaglutida, podrían tener un impacto significativo en la reducción del consumo de alcohol en pacientes tratados por obesidad.

El trabajo, liderado por Maurice O’Farrell, se llevó a cabo en un entorno clínico real con 262 pacientes adultos con un índice de masa corporal (IMC) ≥27 kg/m². Todos fueron tratados con GLP-1 RAs y seguidos durante un periodo medio de 112 días. El objetivo primario fue evaluar el cambio en el consumo de alcohol tras la introducción de estos medicamentos.

Resultados clínicamente significativos

Antes de la intervención, el 68,3% de los participantes se clasificaban como bebedores regulares. De los 143 pacientes con datos cuantificables sobre el consumo de alcohol, el promedio semanal se situaba en 11,8 ± 1,0 unidades. Después de la intervención, esta cifra se redujo a 4,3 ± 0,5 unidades semanales (p < 0,001), lo que representa una disminución global del 63,6% en el grupo con datos cuantificables.

Los efectos fueron aún más notables en los denominados consumidores altos (≥11 unidades/semana), quienes pasaron de un consumo medio de 23,2 ± 1,8 a 7,8 ± 0,9 unidades semanales, lo que representa una reducción del 68%. Los consumidores bajos también mostraron una disminución significativa: de 5,5 ± 0,3 a 2,5 ± 0,3 unidades semanales.

Ningún paciente reportó un aumento del consumo tras el inicio del tratamiento

Ningún paciente reportó un aumento del consumo tras el inicio del tratamiento, y la reducción fue estadísticamente significativa tanto en hombres como en mujeres, sin diferencias relevantes por sexo en términos de porcentaje o unidades semanales.

Mecanismos neurobiológicos

Los autores señalan que este efecto podría explicarse por la acción de los GLP-1 RAs sobre el sistema de recompensa dopaminérgico, implicado tanto en la obesidad como en la adicción al alcohol. Estudios preclínicos y revisiones sistemáticas previas han sugerido que estos fármacos modulan la respuesta dopaminérgica al alcohol y reducen la motivación por su consumo, efectos también observados en modelos animales.

Además, se observó una correlación positiva, aunque débil, entre la reducción del alcohol y la pérdida de peso (r = 0,24), lo que sugiere una posible interacción entre ambas variables, dado el elevado aporte calórico del alcohol. El descenso medio de peso en los pacientes con seguimiento completo fue de 7,7 ± 0,3 kg tras aproximadamente cuatro meses de tratamiento.

Implicaciones clínicas

Estos resultados plantean una hipótesis de gran relevancia clínica: los GLP-1 RAs podrían constituir una nueva vía terapéutica para pacientes con obesidad y trastorno por consumo de alcohol (AUD), una comorbilidad común y de difícil abordaje. Si se confirma en ensayos controlados, este efecto podría permitir intervenciones farmacológicas duales, dirigidas tanto a la reducción de peso como al control del consumo de alcohol.

Según los investigadores, esta potencial eficacia dual de liraglutida y semaglutida podría mejorar la adherencia terapéutica y los resultados a largo plazo en pacientes con perfiles metabólicos y conductuales complejos.

Pese a los hallazgos prometedores, los autores advierten que el estudio cuenta aún con limitaciones. Como bien señalan, constituye un análisis observacional sin grupo control, por lo que no puede establecerse causalidad directa. Además, el consumo de alcohol fue autoinformado por los pacientes, con el riesgo desesgo de memoria o subestimación.

Pese a los hallazgos prometedores, los autores advierten que el estudio cuenta aún con limitaciones

Además, el 28% de los pacientes no completó el seguimiento, lo que podría introducir un sesgo de selección. Por otra parte, el período de observación fue relativamente corto, por lo que no pueden evaluarse los efectos a largo plazo.

Aun así, destacan que los datos fueron recogidos de forma prospectiva como parte del cuidado clínico habitual, lo que otorga validez externa a los resultados.

"Estos hallazgos preliminares deben confirmarse mediante ensayos clínicos aleatorizados con muestras más amplias y seguimiento prolongado", concluyen los autores. Si se validan, los análogos de GLP-1 podrían integrarse como parte de una estrategia terapéutica más amplia para abordar la obesidad y el alcoholismo de forma conjunta.