Atrás ¿Cómo conservar la cadena de frío de medicamentos de uso cotidiano?

¿Cómo conservar la cadena de frío de medicamentos de uso cotidiano?

Las interrupciones en la cadena de frío pueden provocar efectos farmacológicos en el organismo y alterar la estabilidad, la eficacia y la seguridad del fármaco.

Suministros. Cadena de frío

Escrito porRedacción MF

Publicado: 05 octubre 2022

Existe un gran número de fármacos que necesitan que se controle la temperatura de su conservación y transporte, desde que salen de los laboratorios hasta que se utilizan en los hogares. Las interrupciones en la cadena de frío pueden provocar efectos farmacológicos en el organismo y alterar la estabilidad, la eficacia y la seguridad del fármaco. 

Es por ello por lo que en la farmacia se debe contar con equipos de refrigeración con un termómetro que marque las temperaturas máximas y mínimas, y que éstas se inscriban en el libro de registro. 

En relación con la dispensación de los medicamentos, el farmacéutico tiene la obligación de advertir a los pacientes de la necesidad de conservar la cadena del frío en los medicamentos termolábiles, que son aquellos que deben conservarse en la nevera a una temperatura entre 2ºC y 8ºC para que así mantengan su actividad farmacológica de forma óptima.  Por ese motivo, el transporte de medicamentos refrigerados por parte del paciente debe seguir las pautas indicadas por el farmacéutico.

¿Qué tipo de medicamentos termolábiles encontramos?

Las insulinas, las vacunas, determinados antibióticos, ciertos colirios, tratamientos de fertilidad y probióticos son medicamentos termolábiles comunes. Pero, además, todos los fármacos que necesitan conservarse en frío, y por tanto sean termolábiles, tienen que llevar en el envase un cícero(un copo de nieve).

¿Cómo conservar la insulina de forma óptima?

En el caso de la insulina, al ser una proteína, el contacto directo con luz o un mal control de temperatura pueden ocasionar una pérdida en su eficacia. Así pues, debe ser almacenada en el interior del refrigerador (jamás en la puerta) a una temperatura de 2ºC a 8°C hasta la fecha de vencimiento y nunca debe ser congelada. 

Para evitar la sensación de dolor cuando se administra la insulina recién sacada de la nevera, se puede mantener a temperatura ambiente aquella que está siendo utilizada, aunque nunca debe superar los 29ºC. 

Mientras se mantenga esta temperatura no es necesario guardar en la nevera los viales o pensque se están utilizando para las inyecciones diarias. La insulina que se está utilizando sirve durante 28-30 días siguientes a su primer uso; pasado este tiempo deberá ser desechada.

A veces resulta necesario transportar un medicamento termolábil en situaciones de calor (no sólo en verano, también en sitios con la calefacción muy alta). Para llevar de forma segura la insulina, antibióticos, colirios… es recomendable utilizar neveras o recipientes isotérmicos y meterlos en el frigorífico lo antes posible.