Facturación estancada de las farmacias comunitarias en España ¿qué se puede hacer?

La reciente publicación del informe del Observatorio del Medicamento de la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE) sobre el entorno del medicamento ha alertado de que la facturación de las farmacias comunitarias apenas ha experimentado un ligero aumento del 1,65% en los últimos quince años, un dato que contrasta con el incremento del 30,1% en la inflación en el mismo período.

Esta diferencia entre la inflación general y el crecimiento de la facturación farmacéutica indica un problema estructural que afecta la viabilidad económica de las farmacias, especialmente a aquellas que dependen en gran medida de la venta de medicamentos con receta.

Uno de los principales factores que contribuyen a esta situación es la disminución de los márgenes de beneficio, que se ha intensificado por la reducción de los precios de los medicamentos genéricos. Este fenómeno se ve agravado por otra serie de elementos, como el incremento en el coste de las materias primas o los gastos asociados con la distribución y conservación de los medicamentos, entre otros.

Posibles medidas para mejorar la situación

La dependencia de países extracomunitarios para la producción de algunos principios activos, especialmente aquellos relacionados con medicamentos más antiguos y económicos como la amoxicilina o el ibuprofeno, plantea riesgos para la estabilidad del suministro de medicamentos en Europa. La Unión Europea identificaba recientemente 200 medicamentos con posibles problemas de abastecimiento, lo que pone el foco en la urgencia de abordar esta cuestión a nivel político y regulatorio.

La adaptación de los precios de los medicamentos más antiguos para reflejar los aumentos en los costes de producción y distribución podría aliviar las presiones económicas sobre las farmacias y contribuir a mitigar los problemas de escasez. 

Mediante la revisión de precios, se busca que España se equipare a países como Portugal, donde se ha aumentado un 5% el precio de los medicamentos con un precio de venta al público (PVP) de hasta 10 euros, y un incremento del 2% para los fármacos con precios entre 10 y 15 euros, según datos del Ministerio de Sanidad portugués.

Otras de las medidas que podrían ayudar a mejorar esta situación es el impulso hacia la receta electrónica universal, que podría simplificar y mejorar la gestión de los medicamentos. Sin embargo, la implementación de esta medida requerirá de un esfuerzo coordinado y de recursos adecuados.