Atrás Hacia una farmacia más verde: sostenibilidad en la fabricación farmacéutica

Hacia una farmacia más verde: sostenibilidad en la fabricación farmacéutica

La industria farmacéutica está apostando cada vez más por una fabricación más verde, eficiente y responsable. Estos son los principales desafíos a los que se enfrenta.

Fabrica de medicamentos

Escrito porRedacción MF

Publicado: 01 mayo 2025

La industria farmacéutica es clave para mantener la salud pública global, sin embargo, existe un reto al que debe hacer frente, que es reducir al máximo su impacto medioambiental. A este tipo de sector se le ha asociado un elevado consumo energético y de agua y la generación de residuos que mal tratados pueden ser peligrosos.

Es por ello por lo que las empresas farmacéuticas llevan tiempo cambiando sus procesos de producción, buscando no solo cumplir con la normativa ambiental sino también liderar una transformación verde que ayude a cuidar el planeta y su ecosistema.

Desafíos de una transformación sostenible

Llevar la sostenibilidad a los laboratorios y plantas de producción es una tarea compleja, ya que implica modificar prácticamente por completo las cadenas de suministro, invertir en tecnología limpia y rediseñar los métodos de fabricación. Las principales barreras incluyen:

  • Alta demanda energética: Procesos como la síntesis química o la esterilización requieren grandes cantidades de energía.
  • Uso excesivo de agua: Necesaria para limpieza, producción y refrigeración.
  • Manejo de residuos: Los productos químicos deben tratarse adecuadamente para evitar daños en el medioambiente.
  • Complejidad de la cadena de suministro: Existe el reto de garantizar materias primas sostenibles sin comprometer la eficiencia.
  • Regulación en constante evolución: Las exigencias ambientales obligan a las compañías a actualizarse constantemente y adaptarse con agilidad.

Estrategias para una producción responsable

A pesar de todos estos retos, el sector farmacéutico está, desde hace años, adoptando medidas eficaces para hacerles frente de la mejor manera posible. Entre las iniciativas más destacadas están:

  • Química verde: Se sustituyen solventes tradicionales por alternativas más seguras y se optimizan las rutas sintéticas para reducir subproductos tóxicos.
  • Energías limpias y eficiencia: Inversión en fuentes como la solar o eólica, y la incorporación de equipos industriales que reducen el desperdicio energético.
  • Gestión del agua: La reutilización y el tratamiento avanzado de aguas residuales aseguran un uso responsable de este recurso.
  • Cadenas de suministro éticas: Se promueve la trazabilidad y colaboración con proveedores comprometidos con el medioambiente.
  • Digitalización: Herramientas como la inteligencia artificial y el Internet de las Cosas permiten controlar y optimizar procesos en tiempo real, reduciendo errores y mermas.

El futuro: innovación con propósito

Cada vez más compañías integran criterios ESG (ambientales, sociales y de gobernanza) en sus estrategias corporativas, alineándose con marcos como la Directiva CSRD para una mayor transparencia. Apostar por una producción ecológica también se traduce en beneficios reputacionales, económicos y operativos de las empresas que los llevan a cabo. Proyectos como la instalación de paneles solares, el reciclaje de residuos químicos o el uso de tecnologías predictivas son pasos importantes hacia una industria más consciente.

La sostenibilidad no debe concebirse como una carga regulatoria, sino como una inversión de las empresas con retorno en forma de eficiencia, reputación y resiliencia. En un contexto donde la salud global depende de múltiples factores, la responsabilidad ambiental de los fabricantes de medicamentos es más relevante que nunca.