La AEMPS advierte de los riesgos de manipular formas farmacéuticas en casa
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Farmalertas
La AEMPS advierte de los riesgos de manipular formas farmacéuticas en casa
La agencia nacional ha señalado que puede alterar su estado y afectar negativamente a la eficacia terapéutica del medicamento.

Escrito porRedacción MF
Publicado: 01 octubre 2025
Manipular formas farmacéuticas orales sólidas, como comprimidos o pastillas, en casa supone un importante riesgo para la salud, ya que puede alterar el estado del medicamento y afectar negativamente a su eficacia terapéutica. Así lo ha advertido la Agencia Española de Medicamentos y Productos farmacéuticos (AEMPS), quien ha apuntado que, además, podría ocasionar reacciones adversas tanto a los pacientes como a quienes manipulen los fármacos.
“Esta manipulación puede tener un mayor impacto en las formas farmacéuticas de liberación modificada (por ejemplo, liberación retardada, como las gastrorresistentes o de liberación prolongada), los comprimidos sublinguales (ya que no se deben tragar) y los medicamentos de estrecho margen terapéutico”, ha alertado la AEMPS. Por ello, ha asegurado que, de manera general, no se deben manipular los medicamentos.
Consecuencias negativas
Tal y como ha señalado la agencia nacional, la administración oral es, en muchas ocasiones, la vía preferida para la utilización de medicamentos por su facilidad de uso y buena aceptación por parte del paciente. Sin embargo, existen determinadas situaciones clínicas y contextos asistenciales que dificultan el uso de estas formas farmacéuticas, como son los problemas de deglución (especialmente relevantes en pacientes geriátricos o institucionalizados), el uso de sondas enterales, la administración en niños o la necesidad de realizar ajustes de dosis.
Ante estas circunstancias, si no existen alternativas terapéuticas viables, puede surgir la necesidad de manera excepcional de manipular la forma farmacéutica para facilitar su administración, recurriendo a prácticas como partir, triturar, disolver comprimidos o abrir cápsulas, así como mezclarlos con espesantes y alimentos.
Por tanto, es fundamental tener en cuenta que no todos los medicamentos pueden ser manipulados sin comprometer su eficacia o seguridad. De este modo, la AEMPS ha apuntado a las consecuencias de manipular un medicamento:
- Falta de eficacia, por degradación del principio activo o por cambios en la liberación del principio activo y el lugar de absorción y, como consecuencia, cambios en la biodisponibilidad del mismo.
- Alteraciones organolépticas (cambios en sabor, color, etc.)
- Irritación o lesiones en la mucosa oral o gastrointestinal (especialmente esófago y estómago).
- Además, la persona que manipula el medicamento puede exponerse accidentalmente al mismo, lo que puede provocar, entre otros problemas, afectación dérmica, ocular o de las mucosas.
Recomendaciones para pacientes y cuidadores
En este contexto, la Agencia ha lanzado una serie de recomendaciones que deben tener en cuenta tanto pacientes como cuidadores:
- Antes de manipular cualquier forma farmacéutica, en primer lugar, se debe consultar la ficha técnica o prospecto del medicamento para comprobar si se aceptan métodos de administración alternativos como partir, triturar, dispersar los comprimidos o abrir las cápsulas, para facilitar su deglución.
- En caso de que no se contemple un método de administración adecuado para el paciente, se recomienda buscar formas farmacéuticas alternativas que permitan su administración sin necesidad de manipulación. Es el caso de, por ejemplo, las formas farmacéuticas orales líquidas (soluciones, suspensiones o gotas orales) o algunas formas sólidas, como las bucodispersables, sublinguales, masticables o dispersables.
- Si tampoco existieran formas farmacéuticas adecuadas, es preciso consultar con el profesional sanitario o el servicio de farmacia del centro sanitario u hospitalario para determinar si la manipulación del medicamento es posible y cómo se debe realizar. Como alternativa, para algunos principios activos se contempla la formulación magistral de soluciones orales, especialmente para su uso en pediatría.