Alarma ante el consumo de vapers en menores de edad

La tendencia del consumo de vapers ha ido en aumento al percibirse como una alternativa menos nociva del tabaco, usado en ocasiones como alternativa para dejar de fumar. Por otro lado, el desconocimiento ha jugado un papel fundamental en el auge de esta tendencia, ya que, aunque existan productos “sin nicotina”, esto puede suponer una antesala al tabaquismo, incluso para menores de edad.

El peligro de la influencia

La Asociación Española Contra el Cáncer informó a través de su Observatorio “Hacia nuevos espacios sin humo (digitales)” que el 57,2% de los jóvenes encuestados consideran que los cigarrillos electrónicos están de moda porque lo hacen actores, streamers e influencers. Hay que tener en cuenta que en nuestro país la publicidad tanto de los dispositivos como de sus líquidos está prohibida (así como su venta a menores). Sin embargo, la falta de regulación en las plataformas de stream así como en redes sociales, han llevado a que el 83% de los menores han tenido al menos una forma de exposición al vapeo o a las cachimbas. 

> Un total del 91,3% de jóvenes expuestos a hábitos tabáquicos de los cuales más de la mitad han acabado desarrollándolos.

Es necesario entender también que los vapers sin nicotina también son perjudiciales para la salud. Esto se debe a que en los líquidos que se consumen al vapear también hay sustancias como la glicerina o el propilenglicol, los cuales al calentarse producen carbonilos que resultan cancerígenos. Por otro lado, también hay que tener en cuenta la dependencia psicológica que esto produce al crear determinados hábitos cotidianos. 

Los riesgos del desconocimiento

A raíz de la viralización del vídeo de la pequeña que recibía varios productos para el vaping en su Primera Comunión, varias asociaciones y organizaciones se han movilizado para alertar sobre esta práctica. 

Entre ellas Nofumadores.org, plataforma desde la cual se han elevado mensajes sobre la poca percepción de riesgo y la normalización que se da por parte de padres, recordando que esta práctica es "prima hermana” del tabaco.

Esta queja también se han movilizado varios centros educativos. Virginia Rodríguez, portavoz en Málaga de la Asociación de Directoras y Directores de Institutos de Enseñanza Secundaria de Andalucía (Adian) afirmaba en una entrevista que el consumo de vapers en los centros se estaba convirtiendo en un problema. También hacen hincapié en la facilidad que tienen para adquirir los dispositivos ya sea por internet, lugares clandestinos o incluso por medio de mayores, ya sean conocidas o no. 

Es por ello que desde esta asociación destacan la necesidad de establecer y activar protocolos disciplinarios que sirvan como mecanismos de prevención.