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Cistitis en verano, cómo prevenirla y disfrutar sin preocupaciones

¡Verano sin cistitis! Descubre 10 consejos que podrás dar desde el mostrador para ayudar a tus pacientes a prevenir esta molesta infección urinaria y que disfruten así de la temporada sin preocupaciones.

Bañadores secando al sol

Escrito porRedacción MF

Publicado: 21 junio 2024

La cistitis es una infección de orina que ocurre de manera frecuente y que afecta principalmente a las mujeres, pero también puede presentarse en hombres. Aunque este problema de salud en la mayoría de las ocasiones no suele suponer más que molestias durante unos días, si no se trata adecuadamente, puede tener consecuencias más serias.

La cistitis es una infección del tracto urinario baja, específicamente de la vejiga. Generalmente es provocada por bacterias, siendo la Escherichia coli (E. coli) la responsable de ella en aproximadamente el 75% de los casos. Estas bacterias colonizan la uretra y ascienden hacia la vejiga, donde se adhieren a las paredes y causan inflamación. Este proceso puede desencadenar síntomas como presión en la parte baja del abdomen, dolor o ardor al orinar, necesidad urgente y frecuente de ir al baño y en casos más graves, presencia de sangre en la orina. Estos síntomas pueden ser especialmente molestos y afectar la calidad de vida de quienes los padecen.

Al menos 4 de cada 10 mujeres tendrán cistitis alguna vez en su vida

Las mujeres son más susceptibles a la cistitis debido a su anatomía, que facilita el ascenso de bacterias hacia la vejiga. Se estima que al menos cuatro de cada diez mujeres experimentarán un episodio de cistitis a lo largo de su vida, y cerca del 30% sufrirá de cistitis recurrente, con múltiples episodios en un año.

Si bien algunos casos leves pueden resolverse por sí solos, la mayoría de las veces se requiere tratamiento antibiótico para eliminar por completo la infección y que no genere más problemas asociados. Sin embargo, debido al aumento de la resistencia bacteriana, es crucial usar antibióticos de manera responsable y siempre bajo la prescripción de un médico.

Para prevenir la cistitis recurrente, es fundamental adoptar medidas preventivas efectivas:

  • Hidratación adecuada: beber al menos 1,5 litros de líquido al día podría ayudar a eliminar las bacterias del tracto urinario más rápidamente.
  • Orinar con frecuencia: evitar retener la orina durante mucho tiempo, miccionar de manera frecuente reduce el riesgo de proliferación bacteriana en la vejiga.
  • Higiene íntima adecuada: mantener una correcta higiene, limpiando de la parte delantera hacia la trasera después de ir al baño puede prevenir la introducción de bacterias hacia la uretra y la vejiga.
  • Evitar productos irritantes: productos como los tampones, o diafragmas pueden aumentar el riesgo de infecciones urinarias y deben ser usados con precaución.
  • Prioriza ropa holgada: la ropa ajustada hace que aumente la temperatura de la zona y el sudor, incrementando el riesgo de cistitis. 
  • Uso de arándano rojo: se ha comprobado que el consumo de proantocianidinas tipo A2 presentes en el arándano rojo americano podría ayudar a reducir significativamente la recurrencia de la cistitis. Estas sustancias previenen que las bacterias como la E. coli se adhieran a las paredes de la vejiga, facilitando su eliminación.
  • Limpieza adecuada después de relaciones sexuales: orinar después de tener relaciones sexuales puede ayudar a eliminar bacterias que podrían haber entrado en la uretra.
  • Duchas mejor que baños: las duchas son preferibles para evitar la acumulación de bacterias en la zona genital.
  • Evitar el uso prolongado de bañadores húmedos: la humedad que se queda en los bañadores puede propiciar el crecimiento bacteriano, aumentando el riesgo de infección. Lleva un bañador de repuesto y cámbialo a menudo para mantener la zona seca.
  • Ropa interior de algodón: optar por ropa interior de materiales transpirables puede reducir la humedad y el riesgo de infecciones.

La cistitis no solo causa malestar físico sino también emocional debido a su impacto en la vida diaria. Con el conocimiento adecuado y las medidas correctas, podemos prevenir y manejar eficazmente esta infección, mejorando la calidad de vida de quienes la padecen.