Cómo ayudar a que los tratamientos no se dejen a medias

En España, más de la mitad de los pacientes con enfermedades crónicas no cumplen adecuadamente el tratamiento prescrito. Esta falta de adherencia se considera un asunto de gran magnitud para la salud pública a nivel mundial, tal y como recuerda la Organización Mundial de la Salud.

En particular, afecta significativamente a los pacientes con enfermedades crónicas como, por ejemplo, aquellos que padecen depresión. Una de las enfermedades que más desapego presenta a los tratamientos.

El personal sanitario juega un papel muy importante en la adherencia. Gracias a su cercanía y contacto con el paciente, los farmacéuticos se convierten en una pieza clave para detectar y corregir errores y evitar el abandono del tratamiento. Estas son algunas de las estrategias para mejorar el cumplimiento terapéutico:

Pautar dosis menos frecuentes

Una alternativa para estos pacientes es la utilización de formulaciones de liberación controlada o reduciendo el número de fármacos diferentes utilizando, por ejemplo, fármacos en combinación a dosis fijas.

Organizar su medicación

Los pacientes que toman mucha medicación con diferentes pautas suelen ser más propensos a tener una mala adherencia. Esto se puede solucionar con pastilleros que programan semanalmente todas las dosis y contar con algún allegado o cuidador que pueda ayudar.

Ayudarle a comprender para qué sirve su medicación

En algunos casos la falta de adherencia se debe a que el paciente no conoce los detalles de su medicación prescrita. Es fundamental dedicar tiempo a explicarle por qué es importante seguir las pautas que le ha dado su especialista. También es fundamental explicarle cuáles son los síntomas que puede manifestar y las mejoras que podría notar. Todo esto contribuye a que entienda el proceso de su enfermedad y a que se interese más por el tratamiento asignado.

En el caso de pacientes con depresión, por ejemplo, también es importante recordarles que los efectos de los medicamentos que toma se notarán a medio largo plazo y que no son inmediatos.

Ayudarle a buscar una alternativa que se adapte mejor a su situación

Los efectos secundarios son otra de las razones por las que los pacientes dejan de tomar la medicación. Cansancio, somnolencia… En algunos casos se puede solucionar con un cambio hacia otro tratamiento similar. Puedes recomendarle que hable con su médico especialista para consultarle sobre otras alternativas.. 

Utilizar recordatorios

Los recordatorios pueden ser un gran aliado para los pacientes con mala memoria, de los más habituales son las llamadas telefónicas, los mensajes por WhatsApp o los recordatorios y alarmas programadas en el móvil. 

Utilizar un lenguaje sencillo. El medicamento más importante debe mencionarse  al principio

Los pacientes necesitan información clara y entendible. Dirígete a él en un lenguaje sencillo, despacio y sobre todo usando frases cortas y directas. Para que no olvide toda su medicación, nombra el medicamento más importante al comienzo de la conversación. Este será el que más recuerde.