Atrás Melatonina, triptófano y valeriana: mecanismos de acción y criterios de uso en insomnio

Melatonina, triptófano y valeriana: mecanismos de acción y criterios de uso en insomnio

Aunque los tres compuestos están enfocados a facilitar la conciliación del sueño, su eficacia y perfiles de uso difieren notablemente.

Melatonina, triptófano y valeriana: mecanismos de acción y criterios de uso en insomnio

Escrito porRedacción MF

Publicado: 05 junio 2025

El sueño reparador es esencial para una vida saludable y productiva, por lo que, en el abordaje del insomnio leve o transitorio, es común que los pacientes recurran a las farmacias en busca de una solución.

Melatonina: sincronizadora del ritmo circadiano

La melatonina es una hormona endógena sintetizada por la glándula pineal en respuesta a la oscuridad. Su función principal es regular el ritmo circadiano sueño-vigilia. La administración exógena, frecuentemente en dosis de 1mg a 5mg, ha demostrado utilidad en personas con jet lag, trabajo nocturno o alteraciones del sueño asociadas a desregulación del ritmo biológico.

Diversos estudios avalan su uso como cronobiótico más que como hipnótico, y su efectividad se potencia cuando se acompaña de medidas de higiene del sueño. Es importante recordar que su acción no es inmediata: actúa como regulador más que como inductor directo del sueño.

Triptófano: precursor metabólico

El L-triptófano es un aminoácido esencial que actúa como precursor de la serotonina y, en última instancia, de la melatonina. Su presencia en suplementos tiene un enfoque más indirecto: favorecer la síntesis natural de neurotransmisores relacionados con el estado de ánimo y el sueño.

Su efecto es más gradual, y su uso se recomienda especialmente en personas con estrés crónico o síntomas ansioso-depresivos leves que afectan el descanso nocturno. No es un inductor inmediato del sueño, pero puede contribuir a mejorar su calidad con una administración sostenida.

Valeriana: acción sedante de origen vegetal

La valeriana (Valeriana officinalis) contiene principios activos con efecto sedante suave, como los valepotriatos y el ácido valerénico. Su mecanismo implica la modulación de los receptores GABA, favoreciendo la relajación y reduciendo la latencia del sueño. A diferencia de la melatonina, puede tener un efecto más perceptible desde la primera toma.

Su uso es adecuado en casos de dificultad para conciliar el sueño relacionada con nerviosismo o estrés agudo. No obstante, su eficacia es variable y puede producir somnolencia residual en algunas personas, por lo que se recomienda precaución en combinación con otros depresores del sistema nervioso central.

Recomendaciones detrás del mostrador

La recomendación del farmacéutico debe partir de una conversación breve pero dirigida, que permita identificar el origen del insomnio (ansiedad, desregulación del ritmo circadiano, hábitos inadecuados, entre otros) y orientar la elección del suplemento más adecuado: melatonina (útil en casos de desajuste horario o dificultad para regular el ciclo sueño-vigilia), triptófano (indicado en pacientes con estrés mantenido o bajo estado de ánimo), y valeriana (recomendable cuando hay nerviosismo agudo o dificultad para conciliar el sueño).

En todos los casos, es crucial insistir en la importancia de la higiene del sueño, y derivar al médico ante insomnio persistente o si se sospecha una causa subyacente de mayor complejidad.