Atrás La farmacia rural se erige como un punto sanitario neurálgico en zonas despobladas

La farmacia rural se erige como un punto sanitario neurálgico en zonas despobladas

Las farmacias comunitarias en pequeñas poblaciones son imprescindibles y es necesario buscar diferentes vías para garantizar su sostenibilidad.

La farmacia rural se erige como un punto sanitario neurálgico en zonas despobladas

Escrito porRedacción MF

Publicado: 23 septiembre 2025

La despoblación de las áreas rurales en España, el fenómeno demográfico conocido como la España Vaciada, plantea un reto a las farmacias que se ubican en estas zonas. Su presencia en pequeños núcleos de población donde, en ocasiones, ni siquiera llegan a estar presentes los consultorios médicos, las convierte en epicentros a los que acuden los pacientes en busca de sus medicamentos o con dudas sobre su salud.

Por otro lado, la farmacia rural también vive el dilema de cómo mantenerse en estas regiones, más si cabe por la complicada viabilidad económica que tiene. Sin olvidar que algunas ubicaciones requieren una cadena de distribución bien definida, ágil y que permita salvar la posible escasez de determinados fármacos.

En torno a una de cada cuatro farmacias se encuentran en zonas rurales. En total, 5.339, de las cuales poco menos de la mitad están ubicadas en municipios de menos de 1.000 habitantes. No obstante, uno de los principales desafíos que tienen por delante es el relevo generacional: los farmacéuticos titulares que se quieren jubilar deben plantearse qué hacer, teniendo en cuenta que, en su caso, la farmacia funciona como eje de cohesión poblacional y de referencia para los pacientes.

Hay datos poco halagüeños, como el que compartió en Mundo Farmacéutico Jaime Espolita, presidente de la Sociedad Española de Farmacia Rural (SEFAR): “Este año, sólo entre Castilla la Mancha y Castilla y León, se cerrarán cerca de 40”. Ante ese panorama, ¿qué estrategias pueden tomar las farmacias rurales para sobrevivir?

Mostrar el atractivo de la farmacia rural

Hay diversas vías para atraer y retener talento en la farmacia rural. Entre las más efectivas, una buena estrategia que podrían acometer los distintos agentes implicados pasaría por:

  • Formación específica: El desarrollo de itinerarios formativos centrados en farmacia rural permitiría capacitar a los nuevos farmacéuticos en su gestión. Y, al mismo tiempo, acercar el conocimiento a los jóvenes garantizara su continuidad. De igual manera que los prepara para situaciones concretas del día a día, asegurar la sostenibilidad y adaptarse a las necesidades de la comunidad local.
  • Transmisión de conocimiento: El establecimiento de programas de mentoría hace posible que los farmacéuticos experimentados puedan guiar y apoyar a los jóvenes en el proceso de transición a la vida rural y el manejo de la farmacia.
  • Concienciar y sensibilizar: Entre otras funciones, el impulso de campañas para mostrar las virtudes de trabajar en una farmacia rural o hacer patente que se puede desarrollar una carrera profesional sólida y vivir una vida satisfactoria en un entorno cercano y comunitario, como el de un pueblo.

Más allá de la percepción que se puede tener del futuro de la farmacia rural, el horizonte ofrece posibilidades de futuro para los farmacéuticos que tengan claro emprender una vida en zonas más alejadas de las ciudades. En especial, para aquellos jóvenes que buscan mayor calidad de vida y una atención más personalizada y pausada con sus pacientes.